La primera impresión que un posible inquilino se lleva de tu hogar tiene mucho peso en su decisión de comprar o alquilar tu vivienda.
En el mundo inmobiliario existe un término conocido como Home Staging, que consiste en mejorar el aspecto de la casa para que resulte más atractiva a posible compradores. El Home Staging no va de decorar, sino de mejorar el aspecto de los elementos esenciales como las paredes.
A continuación te damos algunos consejos para que tu vivienda resulte más atractiva gracias al color de las paredes:
Cuando conocemos la psicología del color nos damos cuenta que cada tonalidad transmite unas sensaciones u otras. Como es de esperar no todos los compradores se sentirán igual de atraídos por un color porque, realmente, lo que no se sentirán es igual de atraídos hacia la sensación que transmite.
Si por ejemplo quieres enfocar la venta de tu vivienda a un público joven conviene emplear color blanco, acompañado de tonos intensos como rojos, naranjas o amarillos. Tampoco conviene abusar y lo mejor es colocarlos en cuadros o cojines, elementos que destaquen pero se encuentren de forma sutil en la habitación.
Por otro lado la gente mayor se sentirá más cómoda con tonos que inviten a la relajación y no al dinamismo como en el caso anterior. Algunos ejemplos de pintura para una casa enfocada a un público maduro son tonos pastel, beige, tierra y algunos toques azulados.
Si bien el perfil de comprador ideal y sus gustos son la mejor guía para saber que colores venderán nuestra casa más rápido, debemos tener en cuenta que no todos los tonos casan igual en todo tipo de inmuebles.
Si hablamos de una construcción clásica los tonos claros son un acierto, y si por ejemplo tenemos un loft a la venta tampoco conviene abusar de tonalidades muy intensas. La armonía es clave en el buen aspecto de la vivienda.
Una nueva capa de pintura elimina manchas, restos de humedades, grietas leves… pintar además nos obliga a arreglar los pequeños desperfectos de la pared y de alguna manera se crea una atmósfera de “dejar atrás una vida pasada”, justo lo que buscan los nuevos compradores que quieren hacer de esa casa, su propio hogar.
Recordemos que el Home Staging no busca decorar una estancia si no todo lo contrario: dar un toque impersonal.
El objetivo es que la casa parezca atractiva para la mayor cantidad de gente posible, haciendo que el posible comprador imagine cómo quedaría ese lugar cuando él lo adapte a sus gustos. El color blanco es el más neutro que existe por lo que nos ayuda a crear fácilmente esa sensación, además transmite limpieza, añade luminosidad y consigue que una estancia parezca visualmente más grande.
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