Los colores son capaces de trastocar nuestras emociones, podemos sentir paz cuando nos envolvemos de rosa y una energía muy intensa al hacerlo de rojo.
Conociendo este poder ¿Por qué no aprovecharlo? A continuación en delarosaserveis.com te contamos los distintos efectos que tienen los colores sobre tus emociones, para que seas capaz de elegir la pintura de tus paredes en base a aquello que deseas transmitir:
Así es como el color de la pared afecta a tu estado emocional:
Paredes en tonos azules
La gama de los azules va desde los cobalto claros a los marinos más intensos. Todos ellos transmiten sensación de calma, paz y armonía. Quizá porque recuerdan al color del mar y el cielo.
En habitaciones infantiles se recomiendan tonos más claros como son los colores pastel. Para crear una estancia elegante podemos optar por un azul marino, es buena idea combinarlo con elementos decorativos tipo navy.
Paredes pintadas de verde
El verde en todas sus tonalidades transmite armonía, estabilidad y conexión con la naturaleza. En sus versiones más claras el verde es un color muy luminoso, por lo que va genial en espacios pequeños y en aquellos donde queramos potenciar la calma.
En sus versiones más oscuras el verde combina genial con elementos marrones y de madera, es un color relajante que además no cansa la vista.
La elegancia del gris en tus paredes
El gris transmite orden, equilibrio y elegancia. Al ser un tono neutro se puede combinar fácilmente con otros colores, este tono también se asocia a la paz y el respeto.
La sensación predominante de la habitación la darán los tonos complementarios que elijamos, por ejemplo no es lo mismo combinar una habitación de paredes grises con muebles blancos que evocan paz, a hacerlo con muebles rojos que transmiten todo lo contrario.
Tonos morados para las paredes
Los tonos violetas y morados se asocian con la aristocracia y en lo más profundo de nuestro ser evocan romanticismo, sensualidad y serenidad. Sin embargo son también colores enérgicos que aportan vitalidad y energía a quien se deleita con ellos. Muy utilizados en despachos y dormitorios para aportar elegancia con un toque llamativo.
Pintura roja en las paredes ¿Si o no?
El rojo es un protagonista absoluto en la gama cromática, destaca sin igual y puede hacer que una habitación parezca más pequeña. Transmite a quien lo contempla impulsividad, deseo, pasión y determinación.
Los rojos son versátiles y se recomiendan para centrar la atención en un punto concreto de la habitación, más que para pintar una pared entera.
El blanco y otros colores neutro en las paredes
El blanco es un color relajante, transparente y claro, deja que el resto de elementos de la habitación se lleven todo el protagonismo y evoca pureza y formalidad.
Puede utilizarse en todas las paredes de una estancia o como complemento en una sola, muy utilizado para pintar los techos. Tanto el blanco como otros colores neutros y claros resultan muy luminosos, invitando a la relajación y consiguiendo por sí solos que una estancia parezca más grande.